lunes, 6 de septiembre de 2010

Erasmus Galway 2010-11

4 de septiembre del 2010
Durante la presentación del día anterior alguien pasó un papelillo diciendo que iba a celebrar en su casa una fiesta de bienvenida para los estudiantes erasmus.
Mi vecina Claire y yo nos compramos unas cervecillas para ir a la fiesta y buscamos un mapa en google para encontrar la casa del muchacho. Allí eramos muchísima gente, tanta que tuvimos que quedarnos en el jardín. Pero todo el mundo era italiano o francés, se agrupaban por nacionalidades y hablaban su propio idioma. Me aburrí un poco, porque no sé una palabra de francés, y el italiano tampoco es tan fácil de entender como parece. Cuando se dirigían a mí, lo hacían en español, porque todos lo habían estudiado alguna vez en sus vidas y les hacía ilusión practicarlo con una nativa. Sólo conocí a un irlandés, pero el muchacho estaba muy solicitado, ya que todo el mundo quería hablar con él.
Después nos recorrimos andando media ciudad buscando un lugar en el que continuar la fiesta, pero después nadie quiso entrar a un pub.
Antes de volver a casa, vi al cani cantando flamenquitoh con un corrillo de españoles.

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